Dentro del equipo panameño hay una figura poco conocida que trabaja de manera silenciosa y efectiva. Se trata de la psicóloga Rosa Mon, quien se encarga de combatir los miedos, la ansiedad y reacciones de los jugadores frente a la adversidad.
Con el apoyo del cuerpo técnico comandado por Juan Carlos Cubilla, esta profesional con veinte años de experiencia (Master en consejería, educación y psicología) ha estado al servicio del seleccionado con la finalidad de contribuir en el desempeño y formación de los juveniles.
¿En qué ha consistido su trayectoria?
Trabajo desde lo organizacional, gerencial y orientación profesional. Los últimos años me enfocado en desarrollar talentos, músicos, triatletas, tenistas y otras disciplinas. También formo parte de la institución internacional Sports Coaching World con la cual en su momento trabajé con el club Pumas de México.
¿Cómo debe asumirse el rol de la psicología deportiva?
Es bastante nueva la figura, sin embargo, en países más avanzados es parte vital. Es común escuchar a los deportistas declarar en entrevistas que la parte mental es importante para la obtención de resultados, aunque en la mayoría de los casos casi no dedican tiempo a ese aspecto como si ocurre con su entrenamiento físico, técnico y táctico.
¿Cuándo se vincula con la Federación Panameña de Fútbol?
Inicié con la selección sub-20 que fue al Mundial de Nueva Zelanda 2015 donde acumulamos 150 horas de preparación mental y emocional. Desde entonces he tenido intervenciones con los equipos de, fútsal, la reciente sub-20 y en estos momentos con la sub-17.
¿Cuál es su objetivo?
Trabajamos en base a las metas, que en el caso del fútbol se resumen a clasificar a los mundiales. Buscamos facilitar el trabajo para el equipo y cuerpo técnico. Nuestros aportes se encaminan a que sean autocríticos, que sus pensamientos no se limiten a solo clasificar, porque no ser campeones y otras motivaciones.
¿Qué hay en una sesión con la selección?
Presentamos ejercicios, dinámicas que busquen lograr una mejor integración, comunicación, liderazgo con la finalidad de ir desarrollando esas habilidades de manera individual y colectiva. Se plantean escenarios posibles, como jugar con un compañero menos viéndolo desde lo adverso y más.
¿Cómo define a este grupo Sub-17?
Es maduro, sano y se llevan bien. Hay jugadores de todos los niveles sociales y de diferentes provincias del país, lo cual lo hace interesante por toda esa diversidad. Cada uno con su carácter y cualidades, pero esos son los matices que se necesitan en un conjunto. Tienen cosas típicas de su adolescencia y ante ello nos esforzamos por que sean disciplinados y tengan buenos hábitos.
¿Qué sensaciones le ha dejado esta experiencia?
Positivas, donde se han logrado avances en la aceptación del tema y conexión con el equipo para que la psicología este integrada en el proceso de las selecciones. Ha sido una vivencia enriquecedora, los chicos me han tratado bien.